Cuidado del cordón umbilical en recién nacidos
Cuando el bebé nace, se corta el cordón umbilical y queda un muñón. El muñón debe secarse y caer cuando el bebé tiene de 5 a 15 días de edad. Mantenga el muñón limpio con gasas y agua solamente, también puede aplicar una gasa mojada en alcohol de 70 grados alrededor del muñón para que se seque antes. Bañe también el resto de su bebé con esponja. No lo ponga en una tina con agua hasta que el muñón haya caído.
Deje que el cordón se caiga de manera natural incluso si sólo pende de un hilo.
Vigile el muñón del cordón umbilical por si hay infección. Esto no ocurre con frecuencia, pero si pasa, la infección puede diseminarse con rapidez.
Los signos de una infección local en el muñón incluyen:
- Secreción amarillenta y mal oliente del muñón
- Enrojecimiento, hinchazón o sensibilidad de la piel alrededor del muñón
Sea consciente de los signos de una infección más grave. Póngase en contacto con el proveedor de atención médica de su bebé inmediatamente si su bebé tiene:
- Alimentación deficiente
- Fiebre de 38 grados o superior
- Adormecimiento
Si el muñón del cordón se cae demasiado pronto, se podría iniciar un sangrado activo, lo cual significa que cada vez que se limpia una gota de sangre, aparece otra. Si el muñón del cordón sigue sangrando, lleve al niño al médico.
Algunas veces, en lugar de secarse por completo, el cordón formará tejido cicatricial rosado, llamado granuloma. Este granuloma drena un líquido amarillento y claro. Esto con frecuencia desaparece en alrededor de una semana. Si no lo hace, lleve al niño al médico.
Si el muñón del bebé no ha caído en 4 semanas (y más probablemente mucho antes), lleve al niño al médico. Puede haber un problema con la anatomía o el sistema inmunitario del bebé.