Subscribe:

sábado, 27 de diciembre de 2025

ENURESIS NOCTURNA

 

Orinarse en la cama

Orinarse en la cama o incontinencia nocturna es cuando un niño moja la cama por la noche, más de dos veces al mes después de los 5 o 6 años.



Causas

La última etapa de la educación de los esfínteres es permanecer seco durante la noche. Para permanecer seco durante la noche, el cerebro y la vejiga del niño deben trabajar juntos para que él se despierte para ir al baño. Algunos niños desarrollan esta habilidad más tarde que otros.

Orinarse en la cama es muy común. Millones de niños en los Estados Unidos se mojan en la cama por la noche. A los 5 años, más del 90% de los niños permanecen secos durante el día y más del 80% permanecen secos durante la noche. El problema generalmente desaparece con el tiempo; sin embargo, algunos niños todavía se mojan en la cama a los 7 años o incluso mayores. En algunos casos, los niños, e incluso un pequeño número de adultos, continúan teniendo episodios de incontinencia nocturna.

La incontinencia nocturna también es hereditaria. Los padres que se orinaron en la cama cuando eran niños son más propensos a tener hijos que se mojen en la cama.

Existen dos tipos de incontinencia nocturna.

  • Incontinencia primaria. Los niños que nunca han estado secos en la noche de manera constante. Esto generalmente ocurre cuando el cuerpo produce más orina durante la noche de lo que la vejiga puede contener y el niño no se despierta cuando la vejiga está llena. El cerebro de los niños no ha aprendido a responder a la señal de que la vejiga está llena. No es culpa de los padres o de los niños. Esta es la razón más común para la incontinencia nocturna.
  • Incontinencia secundaria. Los niños que estuvieron secos durante al menos 6 meses, pero comienzan a orinarse en la cama otra vez. Hay muchas razones para que los niños se mojen en la cama después de estar totalmente entrenados para usar el baño. Podría ser físico, emocional o simplemente un cambio en el sueño. Esto es menos común, pero no es culpa del niño ni del padre.

Aunque es menos común, las causas físicas de la incontinencia nocturna pueden ser:

  • Lesiones de la médula espinal inferior
  • Defectos congénitos de las vías urinarias
  • Infecciones urinarias
  • Diabetes

Cuidados personales en el hogar

Recuerde que su hijo no tiene control sobre la incontinencia nocturna. Así que trate de tener paciencia. Su hijo también puede sentirse apenado y avergonzado, entonces dígale que muchos niños se orinan en la cama. Hágale saber que usted quiere ayudarlo. Sobre todo, no lo castigue ni ignore el problema. Ninguno de los dos métodos servirá.

Tome estas medidas para ayudar a que su hijo supere la incontinencia nocturna con el tiempo.

  • Ayúdelo a entender que no debe retener la orina durante mucho tiempo.
  • Asegúrese de que vaya al baño en horas normales durante el día y la noche.
  • Asegúrese de que vaya al baño antes de irse a dormir.
  • Está bien reducir la cantidad de líquido que su hijo toma unas horas antes de acostarse. Simplemente no exagere.
  • Prémielo por las noches que permanezca seco.

También podría utilizar una alarma para la incontinencia nocturna. Estas alarmas son pequeñas y fáciles de comprar sin necesidad de una receta médica. Las alarmas funcionan despertando a los niños cuando empiezan a orinar. Entonces pueden levantarse y usar el baño.

  • Las alarmas para la incontinencia nocturna funcionan mejor si las usa todas las noches.
  • El entrenamiento para usar la alarma puede tomar varios meses para que funcione correctamente.
  • Una vez que su hijo esté seco durante 3 semanas, continúe usando la alarma durante otras 2 semanas. Luego pare.
  • Puede que necesite entrenar a su hijo más de una vez.

Usted quizá también quiera utilizar una tabla o llevar un diario en donde sus hijos pueden marcar todas las mañanas que se despierten secos. Esto es especialmente útil para niños de 5 a 8 años de edad. Los diarios le permiten a usted ver patrones en los hábitos de su hijo que pueden ayudar. También puede mostrarle este diario al médico de atención médica de su hijo. Anote:

  • Cuando su hijo orine normalmente durante el día
  • Cualquier episodio de incontinencia nocturna
  • Lo que su hijo come y bebe durante el día (incluyendo las horas de las comidas)
  • A qué horas su hijo toma siestas, se va a dormir por la noche y se levanta en la mañana

Cuándo llamar al médico

Siempre coméntele al médico de su hijo acerca de cualquier episodio de incontinencia nocturna. A un niño se le debe hacer un examen físico y un examen de orina para descartar una infección urinaria u otras causas.

Comuníquese de inmediato con el proveedor si su hijo si está teniendo dolor al orinar, fiebre o sangre en la orina. Estos pueden ser signos de una infección que necesita tratamiento.

También debe debe comunicarse con el proveedor de su hijo si:

  • Su hijo estuvo seco durante 6 meses, luego empezó a orinarse en la cama otra vez. El proveedor buscará la causa de la incontinencia nocturna antes de recomendar el tratamiento.
  • Si usted ha intentado cuidados personales en su casa y su hijo todavía se está orinando en la cama.

El médico de su hijo puede recetarle un medicamento llamado DDAVP (desmopresina) para el tratamiento de la incontinencia nocturna. Este medicamento disminuirá la cantidad de orina producida durante la noche. Se puede recetar a corto plazo para las fiestas de pijamas o usarse a largo plazo durante meses. Algunos padres opinan que las alarmas para la incontinencia en combinación con medicamento funcionan mejor. El proveedor de su hijo colaborará con usted para encontrar la solución adecuada para usted y su niño.

martes, 16 de diciembre de 2025

MUERTE SUBITA DEL LACTANTE. PREVENCIÓN

 


  La Muerte Súbita del Lactante (SMSL), o muerte en cuna, es el fallecimiento repentino e inexplicable de un bebé menor de un año, generalmente durante el sueño, que sigue a una investigación completa sin causa aparente. Aunque se desconocen las causas exactas, se cree que involucra una combinación de factores ( como inmadurez del cerebro, problemas respiratorios y cardiacos) y factores ambientales ( como dormir boca abajo, sobrecama o humo), y se puede reducir el riesgo siguiendo recomendaciones clave como acostarlo boca arriba en un espacio seguro.


¿Qué es?

-Muerte inesperada de un bebé sano, menor de un año, durante el sueño.

-Ocurre con mayor frecuencia entre los 2 y 4 meses de edad

Posibles causas y Factores de riesgo ( Causas desconocidas, pero factores identificados)

-Inmadurez cerebral: problemas del tronco encefálico que afecta a la respiración yal despertar ante la falta de oxigeno.

-Factores ambientales. Exposición al humo del tabaco ( Incluso antes de nacer), sobrecalentamiento, superficies blandas para dormir ( almohadas, juguetes).

-Factores del bebé. Prematuridad, bajo peso al nacer, sexo masculino.

-Factores e riesgo maternos. Madres menores de 20 años y consumo de drogas o tabaco durante el embarazo.


RECOMENDACIONES A LA POBLACIÓN GENERAL PARA PREVENIR EL SMSL.

-Dormir en decúbito supino durante los primeros 6 meses de vida, es la posición más segura y preferible a la de decúbito prono o decúbito lateral, tanto para el sueño nocturno como en las siestas diurnas. Cuando la muerte ocurre de día se halla el bebé durmiendo en prono con más frecuencia que cuando muere de noche ,por lo que el consejo debe hacerse extensivo a personas cuidadoras y personal de guarderías. Sólo en casos de patologías que predispongan a aspiración de reflujo o problemas respiratorios relacionados con dormir en supino, como reflujo gastroesofágico grave o malformaciones de las vías aéreas respiratorias, el consejo será dormir en prono o lateral. Se debe dar consejo de prevención de plagiocefalia postural.

-Desaconsejar el tabaquismo a los progenitores, especialmente a la madre, prioritariamente durante la gestación aunque también después del nacimiento. Si no es posible reducir el hábito, evitar al máximo la exposición del lactante. Si la madre es fumadora, desaconsejar que comparta la cama con el lactante.

-El lactante debe dormir sobre colchón firme y otra superficie plana. Se deben evitar colchones blandos, de lana o la utilización de materiales acolchados o blandos sobre el colchón. Se deben evitar dentro de la cuna almohadones, peluches, juguetes blandos y cualquier otro objeto que pueda provocar la asfixia, como cintas o cordones.

-Evitar el arropamiento excesivo del lactante, especialmente si tiene fiebre, cuidando de no cubrirle la cabeza . Mantener una temperatura agradable en la habitación ( idealmente de 20 a 22 grados). Para evitar que la cabeza quede cubierta se recomienda poner el lactante a los pies de la cuna con la sábana o manta hasta el pecho, bien remetida.

-Recomendar la lactancia materna

-Aceptar el uso del chupete para el sueño a partir del primer mes si ya esta bien establecida la lactancia materna. Puede mantenerse durante el primer año de vida.


                                                              



RECOMENDACIONES A LA POBLACIÓN CON ALTO RIESGO DE PRESENTAR MUERTE SUBITA DEL LACTANTE: Se debe identificar dicha población y recomendar un programa de monitorización domiciliaria:


-Por riesgo de SMSL propiamente dicho:

  -Episodio aparentemente letal previo idiopático

 -Apnea idiopática grave en bebés prematuros

 -Apnea idiopática en bebés nacidos a término.

 -Respiración periódica superior al 5% del tiempo del sueño.

 -Gemelo de una víctima de SMSL

 -hermano o hermana de bebé víctima de SMSL


-Por riesgo de muerte repentina a causa conocida:

 -Dificultades con la ingestión de alimentos que ocasionen apnea o bradicardia

 -Reflujo gastroesofágico grave asociado a patología pulmonar o neurológica.

 -Displasia broncopulmonar grave.

 -Síndrome de hipoventilación central primaria.

 - Lactantes sometidos a traqueotomía o con malformaciones de la vía aérea de riesgo elevado.

 -Otros problemas pulmonares, cardiacos o neurológicos que cursen con apnea o arritmias.

 -Bebés nacidos de madres drogadictas, sólo si se han detectado previamente apneas y el entorno familiar es aceptable.


El sistema más utilizado de monitorización es el de la impedancia torácica. Antes de iniciarse la monitorización es necesario explicarla detalladamente a los progenitores y motivarles. La familia debe recibir entrenamiento para realizar, si fuera preciso, desde una estimulación ligera hasta una resucitación cardiopulmonar. Un programa de monitorización requiere colaboración multiprofesional: Pediatría, enfermería, enfermería gestora de casos y responsable del programa en el hospital de referencia. En la mayoría de los casos se puede suspender entre los 6 y los 9 meses, si en los 2 meses previos no hubo apneas reales y en los hermanos o hermanas de víctimas de SMSL al menos un mes después de la edad a la que falleció la víctima.



 



martes, 11 de noviembre de 2025

CONSEJO SOBRE PREVENTIVO SOBRE EL SUEÑO EN NIÑOS

                                                                   



EVOLUCIÓN DEL PATRÓN DEL SUEÑO "NORMAL". CONSEJOS FAMILIA

   Los niños y las niñas adquieren el patrón del sueño considerado ·"normal" de forma natural y espontánea ( como la deambulación y el control de esfínteres), pero como en otros aspectos del desarrollo infantil hay gran variedad. Los bebés duermen la mayor parte del día, hasta un total de 16-18 horas, pero se despiertan a menudo para comer, ya que su crecimiento es muy rápido. Hacia los 2 meses y medio pasan ya algún rato más largo despiertos y sin comer. A partir del segundo semestre de la vida van apareciendo las fases de sueño de la edad adulta, aunque cada bebé evolucionará de forma particular. Todavía son frecuentes los despertares.

El patrón adulto de sueño se adquiere hacia los 5-6 años. Se compone de ciclos con 5 fases, las primeras constituyen el sueño NO REM, y la quinta el sueño REM.

 -Fase 1: adormecimiento. Dura pocos minutos y se perciben estímulos del exterior

 -Fase 2: sueño ligero, ya no se perciben estímulos externos.

 -Fase 3: transición al sueño profundo. Si la persona se despierta en ese momento se encuentra confusa   y desorientada.

 -Fase 4: sueño profundo.

 -Fase 5: sueño REM donde se se producen los sueños y se caracteriza por movimientos rápidos de los ojos. Si la persona se despierta se encuentra descansada y alerta.


El sueño nocturno tiene 4 ó 5 ciclos de 90 a 120 minutos cada uno. El primer sueño REM de la noche dura 5 minutos, mientras que el último dura 30 minutos, gracias a esto, es más fácil despertarse a última hora de la noche con cualquier ruido que en la primera.

El patrón de duración de las diferentes fases del sueño varía con la edad: el porcentaje de sueño REM es mucho mayor en la infancia que en la edad adulta. Entre cada ciclo se vuelve a la fase 1 y, por tanto se percibe lo que ocurre en el entorno. Si todo está como al comenzar el sueño, este prosigue. Si se producen cambios, se pasa a un estado de alerta y hay un despertar, mecanismo de adaptación  durante la evolución que facilitó la supervivencia. Por eso conviene que los menores se acuesten a dormir en el mismo lugar en que van a pasar el resto de la noche.

El sueño tiene una función reparadora e interviene en la maduración neurológica cerebral. Dormir menos de lo necesario produce irritabilidad y disminución de la concentración. Aunque hay grandes variaciones interpersonales, el tiempo del sueño necesario varía con la edad. Parece que de 3 de cada 10 niños o niñas pueden tener alguna dificultad para adquirir un patrón de sueño regular. En muchos casos pueden tratarse de expectativas poco realistas por parte de la familia, en otros está relacionado con el temperamento infantil y en otros con las rutinas de sueño inadecuadas.


EL SUEÑO DURANTE EL PRIMER AÑO DE VIDA. CONSEJOS PARA LAS FAMILIAS


Si su hijo o hija toma el pecho, es normal que lo pida varias veces durante la noche. Las tomas nocturnas producen descargas mayores de oxitocina y son muy útiles para favorecer la prolongación de la lactancia materna (LM). Es probable  que entre los 7 y 9 meses haga más tomas nocturnas. En general, los bebés que toman el pecho tardan más tiempo en establecer sueño prolongado. Sin embargo, la LM tiene interesantes ventajas para la salud del bebé y su madre, y es el modelo natural de desarrollo del ser humano.

 -Si ha optado por acostar al bebé en su propia cama para facilitar las tomas del pecho, recuerde que para disminuir el riesgo de SMSL el bebé debe estar acostado boca arriba, las mantas y edredones no deben ser pesados, el colchón ha de ser firme y no debe fumar en la casa. La LM contribuye a proteger este riesgo.

 -Si toma fórmula artificial, posiblemente haga pausas nocturnas más largas. Es preferible que duerma en su cuna, acostándole cuando aún está despierto. Si se despierta puede probar primero a consolarle. Se recomienda no encender la luz, ni jugar con él y no sacarlo de la cuna.

 -Si llora intente calmarle con gestos tranquilos. Hacia el año de vida no debe alimentarse durante la noche, debe comprender que la noche es para dormir. Si se alimenta de noche tiene más riesgo de caries. La leche materna no es cariogénica, mientras que las fórmulas pueden serlo, especialmente.


HIGIENE DEL SUEÑO


Cada familia tiene un nivel de tolerancia y sus propias creencias: no hay sistemas buenos ni malos, solo diferentes, aunque siempre hay que mostrar sensibilidad a las necesidades de cada niño o niña en particular y entender que hay circunstancias en que el sueño se trastorna( enfermedades, cambios o crisis familiares..)

Los progenitores deben decidir cuál es el momento en que van a sacar a su hijo o hija de la habitación.

Se recomienda que sea alrededor de los 6 meses, antes de que aparezca la angustia ante el extraño, y también es porque es el mejor momento para establecer rutinas y que adquiera la capacidad de dormirse por sí solo.

Si el bebé permanece en la habitación de sus progenitores será atendido de inmediato si llora. Los ruidos y las acciones de las personas adultas alteran su sueño y si responde cada vez que el bebé se despierta( darle agua, ponerle el chupete, tocarle...), este no logrará ser autónomo para conciliar el sueño.

 -Elija un juguete que sea su compañero de cuna. Este objeto servirá de transición dese la dependencia de los progenitores hacia su autonomía y será el objeto que le tranquilizará.

 -Deje abierta la puerta del cuarto y si lo desea una luz tenue en el pasillo.

 -Procure que la habitación tenga una temperatura confortable y que no haya ruido ambiental. Conviene que lleve ropa adecuada.

 -No conviene que se acueste con hambre.

 -Tener una hora más o menos estable para levantarse y acostarse.

 -Las últimas horas de la tarde se dedicarán a juegos tranquilos. Conviene hacer siempre lo mismo a la hora de acostar al menor. Utilizar distintas rutinas puede dificultar el aprendizaje de dormir.

 .Se evitarán sustancias excitante en la cena y beber demasiados líquidos

 -Es adecuado establecer una rutina especial a la hora de dormir: tras el baño y el cepillado dental, se va al cuarto y se puede tener unos minutos de transición en los que se lee o recita un cuento, se recuerda lo vivido en el día y se planifica la jornada siguiente. Luego un beso y una despedida breve.

 -No conviene favorecer que se quede dormido en un sofá u otro lugar.


Si el menor se despierta por la noche, acuda a su habitación. Conviene mostrarse sereno y emitir un mensaje sencillo. " es hora de dormir mama y papa están cansados, te queremos hasta mañana" Enfadarse, amenazar solo sirve para asustarlo.


                                                                



VENTAJAS Y RIESGOS DEL COLECHO

Ventajas:

-Mejora la estabilidad respiratoria, la oxigenación y la termorregulación en el bebé.

-Provoca despertares sincronizados con la madre, disminuye las fases profundas de sueño.

-Aumenta la prevalencia y duración de la lactancia materna y la producción de leche.

-Facilita el descanso de las madres que amamantan.

-En las zonas en que su práctica es la norma, el síndrome de la muerte súbita del lactante (SMSL) es poco frecuente.

-Favorece el desarrollo de vínculos de apego.

-Favorece el establecimiento de patrones de sueño similares a los de la persona adulta.


Riesgos:

-Si el padre o la madre fuman

-Si los progenitores han tomado alcohol o drogas.

-Con hermanos o hermanas.

-En sofá, cama blanda, con almohadas o mantas pesadas.

-En condiciones de hacinamiento en la vivienda.

-Dicha práctica puede ir en contra de la autonomía de los menores, el sueño como elemento de individualidad y de abandono propio.

-El descanso en la cama de los progenitores puede interferir en las relaciones de la pareja.





sábado, 8 de noviembre de 2025

MORDERSE LAS UÑAS EN NIÑOS

 Se calcula que aproximadamente entre el 40 y el 45% de los menores se muerde las uñas. La onicofagia o hábito de morderse las uñas, es un problema frecuente en la infancia. Alrededor de los 3 o 4 años, algunos niños empiezan a morderse las uñas. La mayoría superan esta costumbre con la edad, pero un 10% continúa mordiéndoselas de adulto. Por eso conviene eliminar esta mala costumbre antes de que se vuelva rutinaria. Es un hábito que puede estar relacionado con varias causas y, para tratarlo adecuadamente, lo primero es saber qué lo provoca.

¿Por qué se muerde las uñas?

Morderse las uñas se considera un hábito nervioso que afecta al 20-30% de la población, sin importar la edad. Tiene importantes consecuencias físicas, ya que puede causar infecciones bacterianas, así como afectar a la unidad ungueal y la cavidad oral. También afecta a la autoestima, ya que nos podemos llegar a sentir acomplejados por el aspecto de nuestras uñas y eso puede perjudicar nuestra interacción con los demás.    La razón por la que los niños y los adultos se muerden las uñas es todo un misterio. Los especialistas lo relacionan con múltiples y variados factores de origen psicológico como el aburrimiento, el estrés, la preocupación, la frustración, la ansiedad, la costumbre e incluso la imitación (si uno de sus progenitores se muerde las uñas, es más probable que el peque también lo haga).

¿Está nervioso o es muy perfeccionista?

Estas son las causas más comunes de la onicofagia. En cuanto a los nervios, este hábito es una de las formas de aliviar las preocupaciones de la niñez (como tener que aprobar un examen, trasladarse de cole o hacer amigos nuevos). Merece la pena mencionar, por lo curioso de su resultado, un estudio publicado en 2015 en el Journal of Behavior Therapy and Experimental Psychiatry. Dicho artículo académico indica que el motor de la onicofagia no es la ansiedad, sino el perfeccionismo. El impacto de las emociones en las conductas repetitivas centradas en el cuerpo concluye que quienes se muerden las uñas suelen ser perfeccionistas y que hacerlo puede ayudarles a calmar su irritación, aburrimiento, frustración o insatisfacción. 

Identificar la causa

Es importante identificar si nuestro hijo se muerde las uñas cuando está distraído o si se las muerde cuando hay un motivo de estrés o ansiedad. En el primer caso lo más probable es que lo deje de hacer por sí mismo, pero en el segundo caso tendríamos que intentar descubrir cuál es la causa de su ansiedad (un problema en el cole, la llegada de un hermanito, un divorcio, timidez asociada a interacciones sociales, vergüenza, un cambio de vivienda...) Es importante no regañarle ni castigarle porque puede que no se dé cuenta de que lo está haciendo ni de sus repercusiones, pero es conveniente intervenir para que lo identifique y empiece a controlarlo. Lo haremos siempre con paciencia, naturalidad y suavidad; sin mostrar insistencia ni enfado. Si insistimos mucho se puede convertir en una lucha de poderMorderse las uñas también puede ser una manía asociada a una actividad concreta como ver la tele. Lo mejor en este caso es hacer consciente al niño del momento en que se muerde las uñas y proporcionarle algún pequeño objeto para que lo manipule o hacerle entrelazar los dedos de las manos. Así conseguimos sustituir el mal hábito por una asociación inocua (ver la tele y apretar una pelota de goma, en lugar de ver la tele y morderse las uñas, por ejemplo). Los niños pequeños también pueden morderse las uñas para imitar a alguno de sus padres. En tal caso el trabajo comienza por nosotros mismos: debemos esforzarnos por evitar modernos las uñas delante del niño. Como a menudo se trata de un acto inconsciente, es aconsejable explicarle que aunque nosotros lo hagamos, es un mal hábito que nos gustaría corregir. Para ello podemos pedirle su "ayuda" y hacer que nos avise para "corregirnos" cada vez que nos vea hacerlo.   

Cómo ayudarle a dejar de hacerlo

Para contribuir a que deje de morderse las uñas, debemos intentar que sea consciente de lo que hace y de sus consecuencias, y ayudarle a abandonar esta costumbre siguiendo los siguientes pasos:
  • Haz que se dé cuenta. Debes alertarle cuando esté haciéndolo para que sea consciente, no como reproche. Una buena idea es establecer una clave especial para avisarle cuando se muerda las uñas como guiñarle un ojo, silbar o tocarle el hombro.
  • Busca soluciones. Si él quiere, se le pueden poner tiritas divertidas en las uñas o comprar en la farmacia algún producto no tóxico específico para evitar que se las muerda. Los métodos de relajación también pueden ser útiles si el hábito es producido por la ansiedad o los nervios.
  • Pacta con tu peque el proteger una uña. Si le parece bien, puedes pactar el "salvar" a una de las uñas de ser mordidas. Algo como "quizás puedas conseguir no morder esta uña". Si lo logra, tras cortarla podemos preguntar si quiere salvar una segunda uña para la próxima vez.
  • Explícale que le perjudica. Se hace daño, provoca heridas e infecciones, los dientes se desgastan, da mala imagen... Hay que adaptar la explicación a la edad del pequeño.
  • Felicítale por sus avances. La burla o el castigo aumentan el problema, ya que favorece la ansiedad.
   Cada niño es un mundo y es necesario ir probando lo que funciona en el caso de nuestro hijo. Por último, si notamos que este hábito puede reflejar algún trastorno o problema (como una ansiedad excesiva) debemos acudir al pediatra o psicólogo infantil para que nos ayude a solucionar el problema.